Nuestro valor más importante son las personas. Tan simple como eso. Las personas que aspiran y realizan las actividades que impulsan a nuestra empresa en su camino de innovación, globalización, calidad y gestión sostenible. Este reconocimiento tiene sus orígenes en una cultura interna que trasciende muros, puertas y jerarquías, que es la fuerza motriz que todos los empleados transmiten y reciben unos de otros. Esa es la cultura de nuestra empresa, un conjunto de iniciativas, valores y atributos que lo cambian todo: nuestra conexión con los mercados, las relaciones entre directivos y equipos, la colaboración entre departamentos e incluso la motivación que nos impulsa en nuestro día a día. El compromiso con esta cultura se produce transversalmente a través de la estructura jerárquica y empodera a cada persona: sus expectativas, sus ideas y su conformidad positiva que impulsa el cambio en toda nuestra empresa para poder suministrarle los mejores productos cárnicos que pueda desear.